Cómo elegir el cordón perfecto para cada uso

Un cordón puede parecer un objeto muy simple, pero según el uso que se le vaya a dar, podemos contar con diferentes acabados para cordones que los hacen perfectos para cada fin y que es bueno conocer para poder escoger el ideal.

Los cordones sin acabado son los más sencillos y básicos. Son económicos pero tiene el defecto de que al no tener terminación de ningún tipo de deshilachan en los extremos. No obstante, son los perfectos para comprar por metro para diferentes manualidades o para realizar acabados para labores de costura. Seremos nosotros mismos los que nos encargaremos de sellar los bordes según nuestras necesidades para que no se deshaga el cordón.

Actualmente, también encontramos estos cordones con corte en caliente o con prensado que sella las fibras y evita que se deshaga el cordón sin necesidad de nada más. En estos casos, se compran de las medidas predeterminadas en lugar de por metro.

Cordones con acabados plásticos que recubren los bordes. Son los típicos que nos encontramos en las zapatillas deportivas o en los zapatos sport. Al tener ese recubrimiento plástico en los bordes conseguimos dos cosas. Por un lado, que el cordón no se deshilache y por otro que resulten mucho más fáciles de pasar por los ojales de las zapatillas. Solo hay que elegir el tamaño correcto según el tipo de calzado y el color que nos guste y ya tendremos los cordones perfectos.

Estos plásticos pueden ser de diferentes calidades y los encontramos incluso ecológicos, a base de plásticos reciclados o que respetan todavía más el medioambiente al ser realizados en productos vegetales que se degradan con mucha facilidad.

Cordones con pestañas metálicas o plásticas rígidas. Este tipo de cordones tienen una pestaña en cada extremo. Son los que encontramos, por ejemplo, en la capucha de algunas sudaderas o en la parte de abajo de una cazadora deportiva. La pestaña puede pegarse al cordón y permite que este se pase más fácilmente a través de la tela. Una vez en su lugar, esta pestaña se deja suelta y se abre, evitando que se nos cuele dentro del agujero y se nos pierda. Estos cordones con pestañas son los que también podemos encontrar en carpetas clasificadoras.

Estos son solo los ejemplos más utilizados de cordones con distintos acabados, pero cada vez son más las opciones que podemos encontrar en el mercado.