Mi abuelo lleva yendo al mismo hospital desde que el mundo es mundo. A pesar de que, por proximidad le tocaría otro desde hace unos años, él sigue yendo al San Carlos, porque le gusta. A mí me parece una auténtica mazmorra, tanto en su construcción como por la mayoría de la gente que lo gestiona, seres siniestros que a veces confundo con brujas, trolls y demás fauna de ultratumba.

La última vez que fui con mi abuelo al hospital era para unas pruebas para relacionadas con el  cancer de cabeza de páncreas. Según me comentó mi abuelo, este cáncer es uno de los más mortíferos (creo que dijo que el menor tasa de supervivencia tiene). Y no porque sea el peor, sino por la dificultad que existe para su detección, a menudo confundiéndose con otras dolencias menos graves. Y cuando se confirma el cáncer ya es demasiado tarde para aplicar un tratamiento efectivo.

Pero, por suerte, se están ensayando algunos métodos de diagnóstico temprano para esta clase de cánceres. Uno de los ensayos se hacía en el San Carlos y mi abuelo se sometió al mismo, recomendado por su médico. Decidí acompañarlo porque siento una especie de atracción morbosa por la mazmorra. Y no me decepcionó la experiencia.

Lo primero es que en recepción nadie sabía nada de unas pruebas de cancer de cabeza de páncreas, pero es que ni en la zona de oncología estaban al tanto. Menos mal que mi abuelo tiene recursos y conoce a casi todos los seres de ultratumba del hospital y paró a una enfermera para preguntarle por el tema. Ella nos indicó donde había que ir.

Esperamos en una sala oscura y mal ventilada. Mi abuelo tiene la paciencia el Santo Job, y no lleva WhatsApp ni nada. Pero a los 20 minutos de estar allí yo ya no sabía dónde meterme… y él impertérrito. Me dijo que para la próxima me trajera un libro porque en ese hospital lo habitual es esperar… “pero son los mejores profesionales”. Para la siguiente prueba a la que le acompañe me llevo “Guerra y paz”.

Es la pregunta que se hacen todos los pacientes que pasan por el quirófano: ¿cuándo podré comprobar los resultados liposucción? Todos quieren que estos resultados sean efectivos cuanto antes, pero hay que tener un poco de paciencia y poner de nuestra parte. La liposucción tampoco es ‘mano de santo’, sino que requiere unas precauciones por parte del paciente, siempre bajo el estricto asesoramiento de la clínica.

En relación a las precauciones que debe tener el paciente a corto plazo para que la lipo sea un éxito, es importante el reposo en los siguiente 4 o 5 días tras la intervención, además de mantener una correcta hidratación con agua y/o zumos. No se debe consumir tabaco ni alcohol durante la primera semana tras la operación y tampoco conviene aplicar ni frío ni calor a las zonas intervenidas.

Una vez pasados los primeros 7 días, el dolor va remitiendo y podremos empezar a hacer vida normal, pero es conveniente respetar algunas normas para que los resultados liposucción sean adecuados. Por ejemplo, muchos pacientes preguntan por el ejercicio físico. En una época en la que cada vez son más las personas que van al gimnasio, es aconsejable moderar el ejercicio en las primeras jornadas. Se trata de coger el ritmo poco a poco y no todo de golpe. Y para las personas que no hacían nada de deporte también es aconsejable ponerse con ello, aunque siempre a un ritmo adaptado a nuestras posibilidades.

La alimentación es el otro aspecto decisivo para conseguir una pronta recuperación de la operación. Lo ideal es seguir un plan nutricional diseñado por expertos en las primeras 10 semanas tras la liposucción. ¿Por qué es tan importante comer bien tras una operación de este tipo? Si queremos que la lipo sea efectiva debemos comer bien. No hay otra alternativa.

Otro aspecto a tener en cuenta es el cuidado de la zona que ha sido intervenida. Debemos evitar que le dé el sol en las primeras 12 semanas. Por ello, muchas personas prefieren pasar por el quirófano en los meses de invierno para no ‘perderse’ el verano. Así mismo, la higiene y los masajes también ayudarán a que la zona intervenida se recupere cuanto antes.

Cuando vuelves a casa después de varios años uno siempre se encuentra con muchas sorpresas: locales que han abierto, bares míticos que han cerrado y amigos de toda la vida que han dado un giro radical a su trabajo. Es el caso de Luis, al que yo siempre conocí detrás de la barra de uno de los bares más populares de la ciudad, que cansado de la noche decidió sacar partido a su otra afición: la cocina.

Es cierto que dar el salto de un bar de copas a un restaurante no es tan grande, pero se nota. Cuando, de casualidad, lo vi fuera de su nuevo local colocando la pizarra del menú no me lo podía creer. Sabía que había cerrado hacía un par de años su bar nocturno. Él me confirmó cuando entré a comer (había que probar su mercancía, por supuesto), que tuvo que echar el cierre porque tenía muchas pérdidas, simple y llanamente.

Así que se pasó un año dando forma a su siguiente proyecto: un pequeño restaurante casi al lado de su antiguo bar, entregado a la cocina de autor con toque asturiano, que para eso estamos en Asturias, claro… Como era muy temprano, no había clientes y me pasó a la cocina donde vi su materia prima: desde el mejor pulpo, a filetones de ternera esperando su momento para convertirse en cachopos, pasando por su querida mantequilla asturiana.

Me comentó que, por el momento, le iba muy bien y que creía haber acertado con el cambio. Nuestra generación sale menos a beber y más a comer y muchos viejos amigos de la zona sirvieron de reclamo para que en las primeras semanas se acercara mucha gente a comer. Por supuesto, no solo vale con tener muchos amigos, la comida debe estar bien, pero es un comienzo.

Me dijo que me quedara a comer y aunque era muy temprano no pude negarme. Eso sí tomé algo ligerito, un sencillo plato de influencia oriental cuyo nombre no recuerdo aunque sí sé que llevaba oricio y una salsa deliciosa con mantequilla asturiana y wasabi, un cruce de locura pero con un sabor delicioso.

Las cortinas screen son el boom de este verano. Todo el mundo las busca en las diferentes tiendas de decoración y bazares porque el boca a boca las ha convertido en la mejor alternativa cuando llega el buen tiempo. Pero, ¿qué tienen estas cortinas para convertirse en las más deseadas?

Pues la clave está en el tipo de tejido del que están hechas estas cortinas, del cual reciben su nombre. El tejido screen es muy novedoso y es el resultado de muchos trabajos de investigación para conseguir una tela inteligente capaz de dejar pasar el grado de luz deseado por el cliente pero, a la vez, proteger su casa de todo lo nocivo de los rayos del sol.

Todos sabemos que el sol tiene cosas muy buenas, como la vitamina D, pero que también tiene efectos nefastos sobre nuestra piel. Pero ya nuestras abuelas sabían que no solo actuaba sobre la piel, sino que el sol también dañaba la tela de las cortinas y los muebles y suelos de madera. Por eso, durante el verano, insistían en mantener las persianas bajas durante las horas de más sol.

Pero ya no es necesario tener la casa a oscuras para protegerla de los daños del sol porque el tejido screen tiene esa gran propiedad. Es un tejido perforado, con cientos de pequeños agujeritos por los cuales pasa la luz, pero con un tipo de tela que permite repeler lo perjudicial del sol, lo que daña muebles y tapicerías del hogar.

Pueden encontrarse diferentes tipos de tejido screen, con los agujeritos más o menos grandes en función de que se pretenda que pase más o menos luz. Por ejemplo, para un dormitorio de adultos puede elegirse un estor de tejido screen con poros bastante pequeños, ya que no es necesaria una gran cantidad de luz. Pero para la sala de estar se escogerá una tela con mayor porosidad para que, en las horas de mayor incidencia del sol, pueda aprovecharse mejor esa luz natural y se ilumine toda la casa.

¿Y qué pasa con el calor? El tejido screen también puede aislar del calor si es de muy buena calidad, pero tiene que indicarlo expresamente en sus propiedades ya que no todos lo hacen. Si no lo indica, su aislamiento será como el de cualquier otra cortina o estor del mismo grosor.

Viendo las series de la tele a menudo me pregunto quienes son los guionistas que hacen las series, porque en muchas series los guionistas son tan buenos que pueden hacer un chiste en que un cancer de colon parezca algo divertido y no la enfermedad tan seria que es. Pero hay muchos otros de otras series que no se merecen ni tan siquiera salir en la tele de lo malos que son. Por ejemplo, los guionistas de series de comedia muchas veces se tienen que buscar las habichuelas para que sus personajes sigan teniendo gracia y para que los espectadores no se cansen de ellos, y en muchos casos no lo llegan a conseguir.

¿Qué estudios hay que realizar para ser guionista? Pues a decir la verdad no se me ocurre cual puede ser la carrera que hay que estudiar para ser guionista, hasta hace muy poco creía que los guionistas debían de ser escritores o algo similar, porque más o menos es lo que hacen, solo que en lugar de escribir un libro tienen que escribir situaciones, ya sean cómicas, dramáticas o de suspense. Porque los guionistas no solamente se dedican a las series de comedia, sino que tienen que hacer guiones para toda clase de programas y no solamente de series. Aunque supongo que habrá programas de la tele que no necesiten de guiones, se dejan llevar y el programa va fluyendo según pasa el tiempo, esa clase de programas suelen ser de humor y suelen ser bastante mejores de los que son guionizados. Hacer los guiones de las series de suspense tienen más gracia desde el punto de vista del guionista, porque le presenta dos retos, que la serie sea entretenida y que el suspense sea creíble y te mantenga enganchado a la serie, lo que no es nada sencillo, dado que no a todo el mundo nos gustan las mismas cosas.

Personalmente me parece muy complicado ser guionista, sobre todo de programas diarios, en los cuales tienes que amoldarte al programa y cada día tienes que estar preparado para hacerlo lo mejor posible en el mínimo tiempo posible.

En un mundo en el que las intolerancias alimenticias son cada vez más habituales a nuestro hijo le tenía que tocar alguna: a la lactosa. La alarma saltó cuando tomó por primera vez leche de fórmula y se puso bastante malo: lo vomitó todo y hubo que llevarle a urgencias. No sabíamos que le pasaba y fue un momento complicado en el que se valoraron otros trastornos pero cuando un par de semana volvimos a probar con la leche de fórmula y se reprodujo el mismo episodio lo vimos claro.

Como mi mujer todavía le daba el pecho, seguimos así. No era la situación ideal para ella porque trabajar y dar el pecho es un fastidio, pero no nos quedaba otra opción en aquella etapa: los bebés tienen que tomar leche. Y aunque  nosotros no somos ya bebés, también la tomamos, como miembros de honor del club central lechera asturiana desde hace años. Pero al niño todavía le quedaba un tiempo para tomar su primera leche de vaca.

Tras visitar al especialista nos recomendaron probar con leche hidrolizada, la cual tiene la proteína de la leche subdivida de forma que es más fácilmente tolerable. El problema, en este caso, no fue que le sentase mal, sino que no le gustaba. Ya nos habían advertido que la leche hidrolizada tiene un sabor muy diferente a la leche materna y también a la de fórmula normal, así que tampoco nos desesperamos… Bueno, mi mujer un poco sí, porque si no empezaba con alguna leche artificial, suponía para ella seguir dando el callo día y noche.

Tras probar varios tipos dimos con una un poco diferente, más densa, que pareció empezar a gustarle. Y un poco después, por fin, mi mujer descorchó la botella de champán. Tras casi un año pudo dejar de darle el pecho.  

Pero no se puede tomar siempre leche hidrolizada, así que ahora estamos en fase de probar con leche de vaca. Como miembros del club central lechera asturiana él lo tiene más fácil, pero todavía no le ha pillado el punto. A pesar de lo riquísima que está, para él es un sabor nuevo, así que tendremos que ser pacientes… como con todo lo demás.

La conocí en un curso y nos entendimos bien desde el principio. Aunque tiene bastantes más años que yo, eso no impidió que tuviésemos una opinión común sobre muchos temas además de unos intereses culturales bastante parejos. Cuando aquel curso terminó, mantuvimos el contacto a través de correo electrónico, pero apenas nos volvimos a ver.

Un tiempo más tarde me enteré. Fue a través de un email que envió a algunos amigos: padecía cáncer de colon. Cuando te enteras de la enfermedad de un familiar no muy cercano o de un amigo que ya no sueles ver, la reacción emocional es muy extraña, al menos la que yo tuve. Apenas conocía a nadie que hubiese tenido esa enfermedad y no sabía muy bien que debía decir. Así que durante un tiempo me mantuve al margen.

Fue a través de un amigo común que supe que quería que pasara a visitarla. Cuando fui a su casa, entré avergonzado por no haber querido saber mucho del asunto, pero rápidamente esa sensación terminó cuando ella tomó las riendas de la conversación. A los cinco minutos me sentí otra vez como en aquel curso, hablando con una amiga, no con una enferma. Al final de la visita hablamos directamente de la enfermedad y ella lo hizo sin tapujos. Me dijo que estaba planteándose participar en un ensayo cancer de colon. En ese momento, por primera vez, la noté que perdía un poco la compostura, y nos abrazamos. Era mi amiga, sí, pero era mi amiga enferma…

Desde aquel día nuestros encuentros han sido mucho más habituales. Para mí ha sido todo un aprendizaje. Sé que en primera instancia no actúe de forma muy correcta, pero sobre todo me ha servido para aceptar la enfermedad: mirar para otro lado no soluciona los problemas de este mundo.

Al final, decidió participar en el ensayo cancer de colon y la veo más esperanzada. Aunque todavía es pronto para sacar conclusiones, parece que la evolución es buena. En un principio, le habían alertado de que el tratamiento experimental podía tener sus riesgos pero, al menos de momento, va todo bien.

Como ya va siendo hora de que saque el dinero de debajo del colchón, he estado buscando entidades para domiciliar mi nómina y demás. No llevo mucho tiempo trabajando, pero lo suficiente para haber ahorrado un poco de dinero. En un principio, fueron trabajos temporales, algunos en los que ni siquiera tenía contrato, así que he ido ahorrando dinero en metálico. Pero ahora he conseguido un trabajo ‘normal’ con su nómina.

Mis padres tienen su dinero en el banco y yo, al principio, no estaba muy interesado en ese tema. De hecho, me ofrecieron abrirme una cuenta pero yo me negué: “si algún día quiero ir al banco, ya lo hago yo mismo”, dije. Bueno, pues ese día ha llegado.

Soy un gran usuario de internet así que no me ha sido nada difícil encontrar información… quizás demasiada. Muchas páginas informan sobre las mejores cuentas corrientes y sobre las diferencias entre unas y otras, pero yo he preferido buscar cuentas especiales. Y me he encontrado con cuenta evo dirigida principalmente a jóvenes. Me ha parecido muy interesante.

Ahora que tengo un poco más de dinero voy a poder dar rienda suelta a una de mis pasiones: viajar. Soy un viajero barato, poco dado a los lujos porque lo que no suelo gastar mucho ni en hoteles, ni en compras ni en caprichos. Me gusta viajar por el mero hecho de salir de mi entorno habitual. Busco experiencias y no satisfacciones materiales.

En este sentido una de las cosas que más me ha llamado la atención de la cuenta evo es que puedes sacar dinero de cualquier cajero dos veces al mes sin que la entidad me cobre nada. Y es que el principal reclamo de esta cuenta es el famoso 0 comisiones.

Yo nunca he tenido una cuenta, pero por lo que me han comentado, las comisiones es un aspecto a tener muy en cuenta. Los bancos más tradicionales suelen cobrar un porcentaje según el uso que le des a la cuenta y sus tarjetas asociadas, así que hay que estar atento, que no quiero perder dinero en tonterías.

¿Estás decidido a reformar tu casa? Ese es el primer paso, ahora hay que ponerse manos a la obra. Por mi experiencia personal puedo decir que la reforma del hogar puede ser algo llevadero o un auténtico infierno. Y para no cometer los mismos errores que yo te diré que lo principal es escoger bien la empresa que va llevar a cabo la reforma vivienda.

Lo principal es tratar de asegurar dos puntos principales: que la empresa está dirigida por profesionales fiables y que tengamos una comunicación fluida. Para asegurarnos de que la empresa es fiable debemos indagar su experiencia y tratar de recabar información sobre otras reformas en las que hayan participado. Después, es el momento de entrevistarnos con ellos para saber si nos vamos a entender bien.

A veces sucede que, por evitar problemas, no aclaramos las cosas bien desde el principio. Es fundamental elegir una empresa en la que el responsable de nuestra reforma esté en sintonía con nosotros. ¿Por qué? En la mayoría de reformas integrales surgen contratiempos. Ante un contratiempo con una  reforma vivienda, nos solemos poner un poco nerviosos, porque suponen la mayoría de las veces un incremento en el tiempo y/o en el coste de la reforma. Si llegados a este punto no tenemos buena sintonía con la empresa o no nos entendíamos muy bien, será todavía peor cuando la cosa se complique…

En todas las listas de consejos para elegir empresa de reformas se habla del presupuesto. Por supuesto, es importante. Antes de firmar cualquier cosa, hay que comparar presupuestos y estar atento a la letra pequeña. Y a ser posible que todo quede negro sobre blanco porque las cosas que se afirman de palabra no tienen mucha validez, sobre todo ante los referidos contratiempos.

Y el último consejo sería: ten paciencia. Una reforma no es una fiesta, trata de tener mano izquierda ante las dificultades pero sé firme para que no se crucen determinadas líneas rojas. Al final, el objetivo de las dos partes es terminar el trabajo adecuadamente, por lo tanto conviene remar en la misma dirección.

Cuando hablamos de pulseras, y específicamente de Comprar pulseras infantiles, nos hacemos cientos de preguntas. Donde encontrarlas, como escogerlas, que las hace las correctas, y en qué ocasiones usarlas o regalarlas, son solo algunas de ellas.

Las pulseras son bonitos y agradables accesorios, escogidos en su mayoría por las mujeres, como una forma de adornar su apariencia diaria, dándole color y vida.

En los hombres, aunque un poco menos común, las pulseras suelen ser elementos con un gran valor simbólico, que los acompañan como recordatorios de personas, promesas, viajes o momentos. Incluso las utilizan de tales materiales y formas, que pueden grabar información en ellas.

Si nos regresamos a la gran travesía que son las pulseras infantiles, nos encontraremos que en este rubro su uso es menos común aunque importante. Los pequeños de la casa también lucen pulseras, con significados especiales y desde las más sencillas hasta las más elaboradas.

En algunos casos, las pulseras son pequeños obsequios que le damos a los niños como conmemoración de hitos en su vida, como el nacimiento, bautismo, cumpleaños o comunión.

Si estas en el caso de comprar pulseras infantiles para agasajar a un pequeño, aquí te comentamos que debe tener una buena pulsera:

  1. Una tira para el nombre

Los niños son lo más enérgico que podrás tener en casa. Van a correr, desplazarse, moverse y empujarse. Por ello, es importante que el modelo que escojas al comprar pulseras infantiles cuente con una tira para el nombre, que evite que puedan perderla en cualquier juego o actividad.

  1. Colores Llamativos

Si bien las pulseras más elegantes son aquellas que se destacan por su sobriedad, y que oscilan entre materiales como el oro y la plata, la realidad es que los niños aman los colores. Una pulsera puede ser elegante, costosa y vistosa, incluyendo colores, motivos divertidos o incluso caricaturas en ella. Todos estos elementos harán que el niño la quiera aún más.

  1. Materiales Resistentes y Seguros

Al comprar pulseras infantiles​, no puedes dejar de preocuparte por el bienestar del pequeño. En este caso, debes decantarte por materiales que sean resistentes a su ritmo de vida, pero que no amenacen su salud.

Debes conocer al pequeño y saber que podría ser alérgico a ciertos materiales, como la plata. En otros casos, el acero inoxidable tomaría un color inadecuado en su piel o podría causarle reacciones adversas. Para algunos, aunque el oro suele ser el más amigable de los materiales, puede ser peligroso el usarlas de este metal, por la facilidad que poseen para perder las cosas.

Los más importante a la hora de comprar pulseras infantiles, es no olvidar quien será el dueño y que los niños, siempre aman los obsequios.