Si te vas a comprar un coche y tu presupuesto alcanza para un vehículo de gama media, ¿qué te parecería acabar teniendo uno de gama alta al mismo precio? No se trata de hacer magia con los números sino de recurrir al mercado de segunda mano. Un Audi de segunda mano con pocos kilómetros y en buen estado, por ejemplo, tiene una significativa rebaja en el precio pudiendo tener un valor similar al de un vehículo algo inferior pero nuevo.
También hay muy buenas ofertas con los llamados vehículos ejecutivos. Se trata de los coches de los altos cargos de las empresas de automóviles, los cuales tienen que cambiar cada pocos meses el modelo que conducen. Se trata de coches de alta gama, con todos los extras pero que al estar usados pueden acabar costando lo mismo que ese mismo modelo en su versión más básica.
Pero no hace falta recurrir a los vehículos ejecutivos ni a los kilómetros 0 para conseguir muy buenas ofertas en coches. En las compraventas es posible encontrar un gran número de opciones en todos los modelos y marcas. Si no se tiene preferencia por algo en concreto, encontrar una buena oportunidad es mucho más fácil ya que siempre aparecen opciones a muy buen precio.
Pero si se tiene muy claro qué es lo que se quiere, también se puede encontrar en el mercado de oportunidades, solo es cuestión de esperar un poco más. Cuanto más concreto y más solicitado sea el modelo que se busca, más complicado puede ser conseguirlo, pero todo es cuestión de tiempo.
Muchas casas de compraventa tienen un servicio de búsqueda al margen de que puedan avisar si les llega ese vehículo a su tienda. El servicio consiste en sondear a otras casas en el resto de España para ver quién puede tener exactamente lo que se está buscando. Cuando finalmente se encuentra, hay dos opciones. Una es que se negocia con ellos y con el potencial comprador. Si se llega a un acuerdo, el vehículo es enviado y el comprador puede tener lo que quiere.
La otra, es que la casa de compraventa cobre un dinero por realizar la búsqueda una vez que esta tiene éxito, dándole al potencial comprador los datos de quién tiene ese coche para que sea este quién negocie el precio directamente. En ambos casos, todos hacen negocio y consiguen exactamente lo que quieren.